La ecuación que te llevará a la solución de tu obesidad, sobrepeso o comer emocional
Antes de nada, me presento.
Mi nombre es Eva, experta en psicoalimentación.
Me gusta definirme como empoderadora femenina. Con esa descripción lo que quiero transmitirte es que te ayudaré a que te ayudes tú misma. Te ayudaré a que reconstruyas la relación que tienes con la comida, a través de mejorar la relación que tienes contigo misma.
Mi mayor motivación es que cada día sumemos más mujeres libres.
Porque sé que tu bienestar es posible.
Porque confío en el gran potencial de los humanos. Porque confío en el gran potencial de las mujeres. Porque confío en ti.
(Aunque escriba en femenino, ante todo somos seres humanos, si eres hombre igualmente eres bienvenido. Sólo tendrás que cambiar la a por la o).
Ahora sí, lo prometido. La ecuación.
Imagina que tu vida es un juego matemático que está compuesto por innumerables ecuaciones. Algunas de ellas son tus sueños, tus problemas o tus relaciones.
En este caso, la que tienes delante y quieres resolver es la de tu obesidad, sobrepeso o comer emocional.
Para ello, tienes que definir de manera adecuada todas y cada una de las constantes y variables que intervienen en la ecuación del problema.
Las constantes no podrás modificarlas, pero intervendrán en la ecuación y tendrás que tenerlas en cuenta.
Las variables pueden ser modificadas y tendrás que irlas ajustando hasta encontrar tu solución, que justamente es tu bienestar físico y mental.
¡Aquí te las dejo!
Constantes. No están en tu mano.
Las constantes son esos factores en los que te puedes apoyar si quieres que lo tuyo siga siendo el victimismo, la queja y la búsqueda de culpables. Los factores, que por el contrario, simplemente tienes que aceptar si te sumas al bando de las personas que asumen las riendas de su vida.
TUS GENES.
Tus genes como especie te vienen dados. Tus genes como individuo también.
Como ser humano, estás diseñada evolutivamente para ahorrar energía, ya que un día esto fue una ventaja para sobrevivir en un ambiente que dista mucho del que tenemos hoy. Por ello, cuando comienzas a hacer una dieta hay un arsenal de mecanismos biológicos que intentarán impedírtelo por todos los medios. Lamentablemente, el ambiente cambia mucho más rápido que tú, a nivel de especie, y nos ha sido imposible adaptarnos a este mundo de excesos de comida para no humanos. Estás diseñada para la “jungla” y la escasez.
Como individuo, tampoco has elegido tener un mecanismo ahorrador más o menos eficiente. Es decir, si como se suele decir eres de “las personas que engordan a la mínima” tienes un mecanismo muy ahorrador, que no elegiste.
La genética no está en tu mano, pero sí lo está qué hacer con ella.
50% DE TU PERSONALIDAD.
Tus genes como especie te vienen dados. Tus genes como individuo también.
Entendiendo la personalidad como rasgo, puedo decirte que el que seas más o menos introvertida o disciplinada, más o menos sensible o impulsiva, más o menos ansiosa o vulnerable, incluso más o menos estable emocionalmente, entre otros muchos rasgos, no depende de ti en un 50%. Pero, ¿qué pasa con el resto? Pues que en otro 50% puedes ser lo que quieras ser. Luego te cuento un poco más.
TU PASADO.
Los físicos no paran de intentar encontrar la fórmula para viajar en el tiempo, pero hoy todavía queda lejos y tendremos que conformarnos con las pelis de ciencia ficción. Tu pasado es el que es. Dale las gracias, aprende de él lo que quieras, guarda en tu mochila lo indispensable y sigue tu camino. Lo único que puedes hacer en este momento sobre tu pasado es reinterpretarlo y contarte la historia que quieras contarte. Podríamos decir que tu pasado es el que tú te cuentas.
EL ENTORNO.
No ha estado en tu mano vivir en un ambiente que quiere tenerte sedada para que obedezcas inconscientemente. Un ambiente que te ofrece mensajes contradictorios. Mensajes que por un lado, te llenan de insatisfacciones, y por otro, te indican cómo acabar con ellas. No es casualidad.
No ha estado en tu mano crecer en un lugar dónde la sanidad se centra más en tratar la enfermedad que en promover y prevenir la salud.
No ha estado en tu mano crecer pensando que no se pueden comer plátanos pero que es muy saludable comer barritas de cereales azucarados, pero eso sí, 0% en grasas.
Nada de esto ha estado en tu mano. Lo importante es que sólo es hasta que logras tomar consciencia. A partir de ese momento, lo que está en tu mano es alimentarte del sistema y seguir alimentándolo o no. Lo que sí está en tu mano es entrar en su juego o jugar el tuyo propio. Lo que si esta en tu mano es ser lo que tú quieras ser y no lo que quieren que seas.
LOS DEMÁS.
No eres un ser que vive aislado. Eres un ser social y como tal, te relacionas con otros muchos a lo largo de tu día y de tu vida.
Primera noción básica: tu libertad comienza donde termina la de otra persona, y la de otra persona comienza donde termina la tuya. Tu libertad te permite decidir comenzar a cuidarte y la libertad de las personas que están a tu alrededor les permite no hacerlo. Es totalmente lícito y ahí no puedes hacer nada. Lo que sí depende de ti, es dejar que eso te afecte o no.
Segunda noción básica: Si tú cambias, cambia el sistema de relaciones. Si tú empiezas a cuidarte puede que las personas de tu alrededor también se animen.
Tercera noción básica: Tu libertad te permite elegir a las personas con las que pasar tu tiempo. Siempre puedes establecer nuevas relaciones con gente que se cuida o que es más acorde a tus inquietudes y valores
Variables. Están en tu mano.
Las variables son esos factores en los que te apoyarás en el momento que decidas responsabilizarte de tu vida, de ser la que conduce.
PSICOLOGÍA.
Uno de los tesoros más preciados que tenemos los seres humanos es la plasticidad cerebral que nos caracteriza. Lo que quiero decir con esto es que tanto nuestro cerebro como su funcionamiento y conexiones pueden modificarse a lo largo de nuestra vida. Esto hace que podamos aprender e irnos adaptando lo mejor que podamos a las situaciones que vivimos. Y no sólo eso, lo mejor es que gracias a la flexibilidad de la mente, podemos construir la vida que deseamos. Y en el caso de que en algunos momentos las circunstancias y situaciones nos sean impuestas, podemos reinterpretarlas creando una realidad mental que nos favorezca. Tu psicología es tu libertad.
Realizar estos cambios no es gratuito para nosotros ya que consume muchísimos recursos emocionales y supone un gran esfuerzo racional. Es por ello que hasta que no sufrimos lo suficiente como para dar ese salto nos conformamos con lo malo conocido. Sin darnos cuenta de que la libertad está ahí detrás.
Por eso, lo mejor que puedes hacer es dar las gracias a ese sufrimiento que te está ocasionado tu obesidad, sobrepeso o comer emocional, y aprovecharlo para dar tu gran salto hacia la libertad.
Trabajar la motivación, confianza, autoestima, miedos y frustraciones entre otros factores psicológicos, es fundamental para vencer tu problema. Son claves. No lo olvides. Y puedes hacerlo gracias a la plasticidad cerebral.
50% DE LA PERSONALIDAD.
¿Eres la persona que crees que eres? Debido a tus experiencias y aprendizajes has ido formando una creencia de lo que eres. Desafía esa creencia. Porque puedo decirte que hay muchas investigaciones que apuntan que la mitad de tu personalidad depende de ti. El primer paso es conocer este dato. El segundo ponerlo en práctica, experimentar y descubrir que en gran medida, puedes ser lo que quieras ser.
Descúbrete. Entender que un acto no te define, que una experiencia no te define, que no se trata de ser blanco o negro, que se trata de a veces ser negro, a veces blanco y a veces el gris que más te guste. Entender eso, forma parte de este descubrimiento. Te invito a probar.
CONOCIMIENTO.
Conocimiento de lo que te rodea. Conocimiento de ti misma. Está claro que el conocimiento no lo es todo, que luego hay que ponerlo en práctica. Pero el conocimiento es el primer paso hacia la libertad. Hacia tu libertad. Está en tu mano tener conocimiento o no, y está en tu mano elegir la calidad de ese conocimiento.
Saca ese espíritu de científica que tenías cuando eras niña, y que quizás olvidaste. Pero está ahí, todos los humanos lo tenemos. No te creas nada. Analiza críticamente. Cuestiónatelo todo. Comprueba tú misma todo lo que puedas.
Cuestiona las creencias que tienes sobre lo que te rodea. Cuestiona las creencias que tienes sobre ti misma.
Cuestiona la creencia de que este alimento no te gusta. Cuestiona la creencia de que ese otro alimento te gusta. Cuestiona todos los conocimientos que tienes sobre tu alimentación. Cuestiona la relación que tienes con la comida. Cuestiona tu identidad. Si, ¡esa!, la de ser obesa, y descubre que no. Que no eres obesa, que sólo tienes obesidad.
Conoce. Conócete. Actúa con libertad.
TU PRESENTE Y TU FUTURO.
Parar. Es muy importante que pares en algún momento de tu vida. Si estás leyendo esto probablemente sea un buen momento para esa parada. Parar. Para reinterpretar tu pasado y preguntarte por tu futuro, por cómo quieres ser, estar, pensar y sentir en tu futuro. Después de esta parada, queda lo apasionante. Vivir. Vivir intensamente el presente. Vivirlo en paz con tu pasado y en la dirección y sentido hacia tu futuro deseado. Pero sin olvidar el presente. Lo único que tenemos. Ese gran regalo.
MOVIMIENTO.
Sé que estas cansada. Cansada de escuchar decir que la solución es más suela y menos cazuela. Cansada de escuchar que lo que te falta es fuerza de voluntad. Que lo que tienes que hacer es ser más positiva, salir a correr y apuntarte a la clase de zumba. Así, como si fuera tan sencillo, sin más.
Sin tener en cuenta que cuando una persona con sobrepeso hace ejercicio no se liberan hormonas de felicidad, sino todo lo contrario… Sin tener en cuenta las limitaciones físicas y mecánicas que supone llevar una mochila de kilos… Sin tener en cuenta que quizás sea necesario trabajar primero la motivación, la confianza y la autoestima…
Sé que estas cansada. Cansada de escuchar decir que la solución es más suela y menos cazuela. Quizás haya que cambiar ese más y ese menos por mejor.
Mejor objetivos pequeños y realistas que te hagan ir superándote… Mejor superar tus límites poco a poco, pero para siempre… Mejor destruir mitos relacionados con la actividad física y entrenar para la vida…
ALIMENTACIÓN.
¿Cómo es tu alimentación? ¿Qué hace que sea de tal manera? ¿Te gustaría que fuera diferente? ¿De qué manera puedes hacerlo? Estaría bien reflexionar… Dónde estás, que te ha llevado ahí. Dónde quieres estar, y cómo llegar a ello.
Quizás haya que dejar paso a los alimentos y dejar ir todo lo que no sean alimentos…
Quizás sea cuestión de conectar un poco más con la naturaleza. Con los alimentos que nos ofrece en cada lugar, en cada momento…
Quizás haya que dejar paso al conocimiento y dejar ir todos los mitos… Esos que te alejan de las mejores elecciones…
Quizás sea interesante despertar la curiosidad y dejar ir la resistencia al cambio, a probar nuevos alimentos y nuevas preparaciones…
Quizás no se trate de prohibiciones, simplemente de desplazar la atención a lo nuevo. Dejar ir lo viejo. Sí, te propongo eso. Te propongo enfocar toda tu atención en los hábitos que quieres ir introduciendo y no en los que quieres eliminar. Da el protagonismo a lo nuevo. La atención es muy poderosa.
CONCLUSIÓN.
Te invito a aceptar lo que no puedes cambiar y a responsabilizarte de lo que está en tu mano. Te invito a ser ingeniera de tu vida. Te invito a resolver la ecuación. TU ECUACIÓN. Te invito a convertirla en una oportunidad de desarrollo personal y superación.
PROPUESTA.
No te declares la guerra con una dieta, declárate el amor con ingeniera de mi vida.
Te invito a desarrollarte como ingeniera de tu vida.
Un auténtico proceso que cambiará tu alimentación y tu vida para siempre.
¿Cómo ser ingeniera de tu vida?
La manera más completa segura y directa:
LA GESTACIÓN
A tu ritmo:
EL CAFÉ CON EVA
EL ÚLTIMO CHAT DEL DÍA
Reprograma tu mente y reconstruye la relación que tienes contigo misma y con la comida.
Ingeniera de mi vida.
Eva.